La montaña puede ser peligrosa, pero también es cierto que cuanto mejor se manejan los esquíes o la tabla de snow, más se disfruta. Por tal motivo te vamos a darte algunos consejos para mejorar tu técnica de esquí, e incidiremos en lo que más cuesta a la hora de aprender.
Debes estar en forma para esquiar
Hay que estar en una óptima forma física. En la última década el material ha evolucionado bastante, por lo que el esquiador ha adaptado la técnica a este cambio.
El material nuevo facilita el deslizamiento, reduciendo el cansancio, y da más comodidad. No olvides que demandará más forma física para poder controlar las reacciones de los esquís al hacer fuerza al apoyar nuestros pies sobre ellos.
El objetivo tiene que estar claro
Lo mejor es ir a disfrutar. Esquiar no es un deporte difícil, somos nosotros los que lo ponemos más complicado. Hay que pensar en positivo y no olvidarnos que cada uno va a su ritmo. Es una equivocación ir más rápido de lo que tus capacidades te permiten.
La posición del cuerpo es importante
Es necesario adoptar una posición natural al esquiar en base a lo siguiente:
- Los pies y piernas deben estar en línea recta con tus caderas. Hazlo tal y como lo haces cuando caminas por la calle. Los niños cuando comienzan a esquiar lo hacen con los pies separados porque les da una equivocada sensación de estabilidad.
- Flexiona las rodillas. Si quieres mantener el equilibrio y encontrarte seguro esto es lo mejor que puedes hacer.
- Centra el cuerpo. Recuerda que el centro de gravedad de tu cuerpo cuando estás parado sobre los esquís está a la altura de tu ombligo. No te tires nunca para atrás, como si fueras a sentarte en una silla, verás cómo te va a costar más girar.
- Los brazos siempre hacia adelante. Al igual que las manos, son un problema para mucha gente que no sabe realmente qué hacer con ellos. Lo mejor es tenerlos hacia adelante con una ligera flexión de codos. Esto ayuda a mantener el equilibrio.
- Relajación del tronco. En caso de que te tenses, vas a tener que hacer más fuerza, por lo que vas a cansarte el doble.
Una vez dejados claros estos puntos, te toca venir a Baqueira Beret a ponerlos en práctica. Al principio es posible que te cueste, pero luego vas a notar la diferencia. Todo al final es cuestión de practicar mucho y los resultados poco a poco van llegando. Lo mejor es no desesperarse y ser conscientes de que merece la pena y disfrutarás más en el deporte blanco.
Y ahora, es momento de reservar tu casa en Baqueira Beret y ¡venir a practicar!