Las gafas de esquí son un equipamiento fundamental para poder deslizarse por las pistas en cualquier momento. Se encargan de protegernos de forma eficaz del frío, viento y del sol, mejorando la visión del deportista.
Si queremos elegirlas de forma correcta, hay que fijarse en 3 criterios:
- Calidad de visión
- Limitación del vaho
- Comodidad
Para contar con una protección y comodidad buenas, las gafas tienen que cubrir el rostro hasta las cejas.
Calidad de visión con las gafas de esquí
En días de sol se recomiendan gafas más bien oscuras que tengan pantalla de espejo, cara a reducir los rayos UV. En días nublados mejor gafas claras. En realidad hay para cualquier tiempo, las cuales se adaptan a las condiciones existentes.
Las personas que normalmente llevan gafas no tienen que renunciar a ver de forma correcta. Es factible usar las gafas de nieve encima, siempre que no aprieten demasiado. Existen los modelos OTG, que están diseñados para los deportistas que necesitan correctores de visión.
Los colores de los cristales
- Verde, para acentuar el verde natural del entorno
- Amarillo, para crear contraste
- Gris, para una visión no modificada
- Marrón, ideal para la comodidad visual
Limitación del vaho en las gafas de esquí
Actualmente las gafas incluyen tratamientos antivaho para que pueda paliarse esta molestia:
- Pantalla simple que tiene tratamiento antivaho en la pantalla interior
- Pantalla doble con tratamiento antivaho con bolsa de aire aislante que crea un filtro térmico
- Pantalla doble que tiene aireaciones, para ventilación y tratamiento antivaho máximos
Comodidad en las gafas de esquí
Si quieres que las gafas no te molesten en la montaña, se incluyen varios tipos de espumas para una adaptabilidad óptima en el rostro de los esquiadores. Las gafas totalmente herméticas con ajuste por correa suelen ser las más comunes, aunque no deben apretarse demasiado. Recuerda que la nariz no puede quedar nunca comprimida.
Lo recomendable es que la espuma pueda adaptarse de forma perfecta a la forma del rostro, así disfrutarás de la sensación que tendrás de libertad y comodidad que haga que te olvides de que estás llevando gafas.
Unas gafas que estén bien adaptadas al rostro son sin duda garantía de una buena sesión de nieve. Algo que debes tener en cuenta es que tienen que cubrir de forma completa la cara, hasta las cejas, para que la luz no impida una buena visibilidad en tus gafas de esquí.
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